La Roomba Combo J9+ es aún más grande que las anteriores, ya que además de recoger el polvo que aspira, también tiene un depósito de agua para que el robot se recargue de forma automática y pueda fregar sin preocupaciones de si tiene agua o no. El depósito suele aguantar más de un mes, según la frecuencia de uso. En la base también está la bolsa de vaciado del polvo y cajones para guardar accesorios de la aspiradora.
Éste robot a parte de ser más grande también es más inteligente comparándolo con el modelo anterior, el J7+. Se debe al sistema operativo, que cuenta con una función llamada Dirt Detective, que es el encargado de encontrar la suciedad para eliminarla. En concreto, dicha función hace que el robot se aplique más en aquellas zonas donde sea más necesario o tenga más suciedad.
En cuanto al funcionamiento del mismo, es mediante la aplicación de iRobot, donde primero la aspiradora hará como un mapa de las diferentes habitaciones que hay para poder luego programar las diferentes áreas de limpieza. También es posible especificar una limpieza más profunda en un lugar determinado, humedecer más o menos la mopa, la intensidad del aspirado y programar su funcionamiento. Controla a la perfección los espacios gracias a los sensores que lleva.
El sistema de fregado de esta Roomba funciona con una mopa que se va humedeciendo para pasar por el suelo y limpiarlo, sin sustituir a la fregona tradicional en caso de necesitar limpiar a fondo. Al depósito se le puede añadir un poco de friegasuelos al agua para mejorar la limpieza.
Irobot, ha mejorado el diseño colocando una lámina que da la sensación de ser de madera en la parte superior para que al tenerlo a la vista quede como un elemento de decoración más de la casa.
En definitiva, un robot aspirador muy completo, mejorando la versión anterior en detalles como el depósito de agua o la limpieza más profunda.